Hito Patrimonial de la ciudad

Como parte de los puntos que sirvieron para que Valparaíso fuese nombrada ciudad Patrimonio de la Humanidad, se consideraron algunos de sus personajes típicos.

Esos Personajes que recorren las calles ofreciendo un trabajo especial, como es el caso del afilador de cuchillos, del chinchinero y el del vendedor de motemei.

Este último, con su especial y característico grito es un aporte cultural que le otorga identidad a la ciudad porque nos comunica con viejas tradiciones y nos conecta con lo más propio de un tiempo pasado y de un lugar que ha ido variando en su fisonomía.

El recorrido de sus ventas

Habitualmente me doy vueltas por los mismos lugares de Valparaíso y Viña del Mar porque mi clientela me pide que no los olvide: Los lunes y martes recorro Playa Ancha alto y bajo, los miércoles me voy hacia el cerro Placeres y camino por todo el cerro, los jueves me dirijo al límite entre Valparaíso y Viña por Recreo y Esperanza y los viernes paso Viña del Mar, por el plan entre 1 y 2 Norte en donde tengo una clientela que me es sumamente fiel.

Habitualmente los mejores meses son de Junio a Agosto ya que parece que el frio es el clima mas atrayente para comer el motemei.

Actualmente estoy dejando un poco de lado las ventas ya que la gente no me compra el producto. Estoy también dedicado a vender tortillas de rescoldo las que si son bastante apetecidas.

Es una pena que no se venda mas el motemei porque en algún momento yo me iré con el Señor y nadie mas tendrá conocimientos para la producción del mismo.

El Motemei

El motemei es producto del mote de maiz cocido. Su producción lleva un largo proceso de lavado o sancocho en lejía hasta que suelta el hollejo cuando se refriega con las manos. Lavado con agua corriente para quitarle posibles olores se procede a la cocción y al secado, por medio de aireación.

Este producto se puede comer solo, acompañando los porotos, el caldo o los huesillos que son parte de la dieta del pueblo. El motemei es un grano amarillo intenso producto del maiz seco el que una vez cocido tiene un suave sabor harinoso.

Mi Biografía

Soy Carlos Martinez, el último vendedor de motemei de Valparaíso.

Por muchos tiempo, desde que tenía 8 años, he estado ligado a este oficio ya que desciendo de una familia que se dedicaba a esta actividad.

Mi abuelo, quien me recibió al nacer ya que mi mamá no alcanzó a llegar al hospital, me abrigó con las mantas que le permitían mantener calentito el mote y me puso en el canasto en que llevaba la venta del día.

Pese a que nací en Santiago, nos vinimos al Puerto cuando yo era muy chico y desde entonces empecé a acompañarlo cada noche para vender no solamente el motemei sino también las tortillas de rescoldo que llevaba junto al mote.

Yo debo lamentar que soy el último artesano que mantiene este oficio ya que no tuve hijos hombres que lo sigan en el tiempo y cuando me vaya junto a Mi Señor ya nadie más cantará el pregón que me acompaña.